lunes, 29 de abril de 2013

Psicoanalista

Consulta del acreditado psicoanalista doctor José R. En el diván, una elegante mujer casi en la cuarentena.

- ¿Cómo se siente usted hoy?
- Regular. Mi esposo no me presta ni la más mínima atención.
- ¿Siguen, pues, sin hablar entre ustedes?
- Prácticamente nada. Apenas una o dos veces por semana. Y además...
-¿Sí…?
- Pues nada. Que me cobra una pasta cada vez que hablo con él.
- ¡No me diga! ¿Y usted accede a ello?
- Es que si no...
- ¡Bueno, bueno, usted sabrá lo que hace! ¿Y en lo que se refiere a las relaciones... ejem... íntimas?
- De pena,  créame. Además... me ronda la sospecha de que tiene una amante.
- ¡Eso es muy grave! ¡Debiera usted pedirle explicaciones.
- Ya...
- En fin, se terminó el tiempo de la consulta. Puede usted pagar su importe a la salida a la secretaria
- Muchas gracias, doctor. Muy amable.
- De nada. Encantado.
- Por cierto, Pepe: ¿puedes llevar tu esta tarde a los niños al cole? Tengo una reunión en el club de lectoras.
- No te preocupes querida. Los llevaré yo.
- Estupendo. ¡Hasta luego!

Un día en las carreras

En su defensa, el acusado manifestó que el día de autos se hallaba en las carreras.

Pecar contra el sexto

- Padre: he pecado contra el sexto
- ¿De pensamiento y obra, hijo?
- Solo de pensamiento, padre, solo de pensamiento
- Pues entonces he de imponerte doble penitencia

sábado, 27 de abril de 2013

La intimidad de la Infanta

Dice la Infanta que no entrega al juez su declaración de la renta porque ello violaría su intimidad. Yo debo de ser un simplón, porque por más que lo pienso no logro averiguar qué pueda haber de íntimo en una declaración de ingresos legalmente obtenidos (los ilegales, quien los tenga, no los declara).

Tonterías

Como no tenía un listón para cortar el cristal utilizó un TomTom.

Aquella no fue una pesadilla normal; aquella fue de las que se muerden la cola.

La tele de los obispos

Ayer, haciendo 'zapping', fui a parar en el telediario de cierta cadena patrocinada por la Conferencia Episcopal. Un tipo, dicen que periodista, interpretaba a su peculiar y fachosa manera las noticias del día. Y de pronto empezó a hacer publicidad de un reloj, como si aquello formará parte de la actualidad. La maniquí que tenía a su lado esbozaba mientras tanto alguna sonrisita. ¿Queréis creer que cuando más digno de crédito me pareció el tipo repeinado fue cuando hablaba del reloj suizo? ¡Qué baratos -o no, vaya usted a saber- se prostituyen algunos!

Otegi

Nunca me he referido al Estado español para eludir el término España. Me parece legítimo que haya pueblos que quieran independizarse de ella -o que, al menos, les dejen pronunciarse sobre el particular-, como legítimo es que haya quebequenses que quieran hacerlo de Canadá (al que, por cierto, no llaman "Estado canadiense"). Utilizada pues la expresión Estado español en el sentido que la DRAE da al término (conjunto de los órganos de gobierno de un país soberano) diré que hay pocos ejemplos que ilustren tan claramente la naturaleza escasamente democrática del Estado español como el de mantenimiento en prisión, por razones exclusivamente políticas, de Arnaldo Otegi.

Monago

- El gobierno de Monago es el de los mejores.
- Vale. ¡Chico, otra cazalla al señor!

Decanos

Viendo los méritos de los decanos de algunas facultades de la Universidad de Extremadura, me pregunto por qué demonios yo no he ganado la medalla de oro en la carrera de los 100 metros lisos.

Parábolas

Se dirige el Maestro a sus discípulos:
«En verdad, en verdad os digo: y = ax^2 +bx +c»
Y Tadeo, tan escaso de inteligencia como sobrado de bondad, mientras da un toque con el codo a su vecino de olivo:
«¡Mateo, oye, no entiendo! ¿En qué lengua habla el Señor?
«En la de los matemáticos, tontaina. Nos ha ofrecido un parábola»
«¡Ah, Pues menos mal que no ha sido una lemniscata!».

Virgen de la Montaña

«A la Virgen de la Montaña no se le puede decir que no. No había excusas. Responsabilidad inmensa y honor irrenunciable». María José Ordóñez, directora del Instituto de la Mujer de Extremadura, ayer en Cáceres, en algo que llaman pregón. ¡No siempre es de lamentar ser hombre!

Obispo de Allclalá

Ser obispo le puede ocurrir a cualquiera. Ser de Alcalá, no digamos. Pero hay que ser verdaderamente desgraciado para reunir ambas condiciones.

Ingeniería jurídica

Como todos sabréis, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha celebrado esta mañana audiencia sobre la llamada doctrina Parot. Ante la posibilidad de que dicho tribunal deje sin efecto tal norma, el ministro del Interior, Jorge Fernández, ha asegurado que las autoridades españolas aún tienen margen para la "ingeniería jurídica".
¿Que quién es este tipo? Sí, hombre, sí, recordad: el mismo que se opone al matrimonio entre personas del misimo sexo porque «no garantiza la pervivencia de la especie».
¡Lástima que cierta ingeniería genética no hubiera sido aplicada cuando yo me sé!

Floriano

Le manifestaba el otro día a una amiga mi extrañeza por el hecho de que un personaje como Floriano ocupara un puesto de tanta relevancia en el Partido Popular. «Pues está muy claro», me dijo. «En todos los partidos necesitan de un tonto en el que la gente pueda descargar su enfado, dejando así incólumes a los que de verdad mandan».

Me vino a la mente esa... probablemente leyenda, antes que realidad, según la cual en muchas grandes fábricas de Japón hay colgados del techo unos monigotes, cual sacos de boxeo y apariencia de ejecutivo, a los que los explotados trabajadores nipones golpean ferozmente en sus minutos de descanso para descargar su ira.

Periodistas

Existen, a mi modesto entender, tres clases de periodistas. La primera está formada por los que son independientes, cuentan lo que sucede y jamás mezclan opinión e información. La segunda clase la forman quienes se venden al mejor postor y no tienen inconveniente en mentir, engañar manipular, a quienes confían en elos. Finalmente la tercera clase está formada por quienes, vendiéndose, ni siquiera son conscientes de ello, probablemente a causa de un mecanismo psicológico de autodefensa que les permite dormir cada día. Está última categoría es la más perniciosa.